Un equipo siempre tiene un plan

La dinastía de los Patriots

Hace unos días se disputaban las finales de conferencia de la NFL (Liga de Fútbol Americano), de las que saldrían los dos finalistas de la próxima Super Bowl. En uno de los duelos, se enfrentaban uno de los mejores equipos de la temporada, los Chiefs de Kansas, frente a uno de los equipos más exitosos durante los últimos 20 años, los Patriots de New England. Los datos del equipo de Boston son impresionantes: han ganado 5 Super Bowl, llegado a la final en otras 3 ocasiones, 10 veces finalista de su Conferencia…Datos que lo confirman como una dinastía histórica del fútbol americano.

Finalmente, fueron los Patriots los que vencieron en la prórroga, en uno de los partidos más emocionantes y espectaculares de la temporada, y estarán por tercer año consecutivo en la Super Bowl. La pregunta que nos podemos hacer es: ¿cuáles son las causas de esta hegemonía “patriota” y qué podemos aprender de ellos para aplicar en nuestras empresas y equipos?

Planificación y continuidad

Uno de los aspectos que parecen más necesarios a la hora de afrontar la visión de un equipo, empresa o proyecto personal, es planificar qué pasos son necesarios para alcanzar los objetivos. La planificación estratégica ha permitido que los Patriots continúen en lo más alto durante tantas temporadas, incluso habiéndose desprendido de grandes jugadores. Siempre fueron sustituidos por jugadores con talento que en otros equipos no triunfaron. De poco vale, construir grandes estrategias y visiones compartidas, sin una planificación exhaustiva y detallada.

Además, el éxito de cualquier equipo nunca suele ser fruto de la improvisación o la casualidad. Sino que sobreviene cuando se da continuidad al proyecto. En este sentido, la continuidad durante casi veinte años, de tres figuras clave dentro de la franquicia ha resultado determinante: el propietario, Robert Kraft; el entrenador, Bill Belichick; y el jugador más importante sobre el que se construyen los equipos de fútbol americano, el quarterback Tom Brady.

Sin embargo, la presión actual por conseguir resultados inmediatos hace casi imposible mantener las posiciones directivas, si no se cumplen objetivos. Ahora bien conveniente recordar, que durante la primera temporada en la que el actual entrenador de los Patriots se hizo cargo del equipo, los resultados fueron malos (5 victorias, 11 derrotas).

El bien común por encima de ambiciones personales

Otro de los elementos que destacan en el éxito de un equipo es saber controlar los egos. Y esto tiene mucho que ver con que el bien común del equipo esté por encima de cualquier ambición personal. Lamentablemente, estamos más acostumbrados a ver como las ambiciones personales (subidas salariales, buscar un mejor puesto, alcanzar los objetivos personales) priman sobre los objetivos grupales. O porque éstos no existen, o porque no se ha establecido un propósito compartido.

Es cierto que, en el deporte o en actividades dónde los resultados dependen del trabajo en equipo, el objetivo compartido es el “lait motiv” del grupo. Pero no es menos cierto, que es en ese tipo de entornos dónde el ego de cada miembro del grupo es más grande aún. Una de las claves del éxito de los Patriots radica en que ninguno de sus jugadores es el mejor pagado en su posición en la NFL. Jugadores como Tom Brady, que debería ser el mejor pagado, rechazan dinero de contratos y prefieren formar parte de un equipo competitivo.

El “Hail Mary” como último recurso

En el futbol americano, un Hail Mary es una jugada que consiste en lanzar el balón a larga distancia para que los receptores situados en la zona de anotación, puedan lograr un “touchdown” (anotación de 6 puntos). Dicha jugada se utiliza en los segundos finales, como último recurso y a la desesperada para lograr dar la vuelta al marcador.

En el mundo de la empresa y, en particular, dentro de un equipo, hay muchas decisiones y acciones que se pueden denominar “Hail Mary”. Por ejemplo, cuando los resultados no llegan, y no se vende lo suficiente, aparecen los famosos “spiff” o bonos comerciales, con los que se incentiva a los vendedores para que vendan el producto o servicio y obtengan directamente una comisión. O cuando existe un clima de desmotivación entre los empleados, se utiliza alguna fiesta o alguna charla motivacional para levantar la moral de la tropa.

Normalmente, ninguna de estas acciones, suelen tener una gran efectividad, ni un alcance a largo plazo. Y los resultados suelen ser decepcionantes. Como suele suceder con los “Hail Mary” en un partido de fútbol, dónde es altamente improbable que se logre anotar el “touchdown”.

Mantener la calma en situaciones límite

Uno de los aspectos que más me sorprendió del partido disputado entre los Patriots y los Chiefs fue la serenidad con la que ambos equipos afrontaron los últimos minutos del partido. Nunca se desconcentraron, ni tomaron decisiones precipitadas. La razón estriba en que, en el fútbol americano, todo o casi todo está perfectamente planificado. Las jugadas están diseñadas previamente, y se intenta evitar jugadas desesperadas, como los “Hail Mary”. Hay un plan de juego, incluso en las situaciones límite.

Un equipo necesita mantener la calma en los momentos de presión. Y la mejor forma de hacerlo, es centrándose en el trabajo, en la tarea, en aquello que cada uno sabe hacer. Para eso es necesario que exista una alta especialización: saber exactamente qué hace cada persona, y qué rol desempeña. Y esta es otra de las características de este juego: cada jugador tiene un cometido y dentro del equipo hay varios equipos y entrenadores (ofensivos, defensivos, equipos especiales…)

El fútbol americano, más allá de la espectacularidad del juego, de la vistosidad de los cascos y protectores, de la dureza del juego… es planificación, especialización, estrategia y táctica, y está orientado a lograr un propósito compartido dónde el bien común, prima por encima de los intereses individuales. Por eso, las empresas y los equipos pueden aprender las enseñanzas que nos dejan los Patriots y entender las razones por las que se han convertido en una dinastía dentro del fútbol americano.

“Ponerte un objetivo no es lo más importante. Decidir qué harás para alcanzarlo y apegarte al plan lo es”.

(Tom Landry, ex-entrenador Dallas Cowboys)

Sights & Sounds: Chiefs Vs Patriots