Sólo nos transformamos cuando aprendemos

Dicen que el motor del cambio y la transformación es el aprendizaje. Cuando abordamos un proceso de cambio buscamos la receta milagrosa. Lo que tenemos que aprender para transformarnos sin dolor, y de un modo rápido, casi inmediato. A mí me costó tiempo entender que lo que realmente necesitas aprender para abordar un proceso de cambio, va más allá de unos conocimientos técnicos o teóricos sobre un tema concreto, con independencia del ámbito al que te dediques.

Durante este año, he aprendido sobre temas relacionados con mi trabajo (motivación, gestión del cambio, liderazgo, construcción de equipos…) a través de la lectura, cursos, presentaciones. Y también contrastándolo con mi experiencia personal. Lo aprendido me han permitido descubrir mi vocación y activar mi motivación. Todo esto es necesario y ayuda, por supuesto, pero hay otro aprendizaje que es el que permite dar el salto, el que se queda con nosotros y se integra en nuestro ser.

Aprendizaje experiencial

Me refiero al aprendizaje que se vive y se experimenta cada día. A veces siendo consciente de cosas que te sirven, y que cazas al vuelo. Y otras, la mayoría, viviendo dormido, y cuando menos lo esperas, descubres lo que significaba aquella conversación con algún amigo, aquel libro que leíste, aquella frase de un profesor, o aquella experiencia que viviste sin darte realmente cuenta de qué significaba.

“Los verdaderos aprendizajes, los que se quedan dentro ti, son aquellos que tienen que ver con la persona, con el ser.

Con lo que comenzamos a integrar dentro de nosotros, y permiten nuestro crecimiento y desarrollo personal.

Y éstos, por suerte o por desgracia, no se enseñan ni en los libros, ni en los cursos, ni con los mejores profesores.

Diez aprendizajes de 2016

En estos días en los que hacemos balance de lo vivido, planificamos nuestros objetivos en base a nuestros sueños y deseos para el nuevo año. Aunque quizás sea conveniente pararnos a pensar en cuáles fueron nuestros aprendizajes, qué pudimos incorporar e integrar en nuestro ser.

  • «No hay maestros ni seres superiores». Todos estamos en el camino, y cada persona nos puede enseñar algo que necesitamos aprender en cada momento. El error es creernos demasiado listos. O darle una excesiva autoridad a determinadas personas, lo que conduce a la más absoluta de las decepciones.
  • “Todo lo que sucede conviene”, aunque no entendamos la razón que hay detrás. Cada persona/cada situación que aparece en nuestro camino, está ahí para enseñarnos algo. Aunque a veces ni siquiera sepamos qué es, ni podamos imaginarlo.
  • “Para encontrarse hay que perderse, y para encontrarse hay que dejar de buscarse”. A veces las respuestas nos llegan cuando estamos haciendo otras cosas, y como obra de arte, todo comienza a encajar.
  • «No hay recetas milagrosas» que permitan encontrar la felicidad. Sólo cada persona puede descubrir su propio camino.
  • «Es preferible aceptar la realidad a querer tener razón». Por mucho que queramos que las cosas sean como nosotros deseamos, nunca se cumplirán al cien por cien… o si. En cualquier caso, no sólo depende de mi. Empeñarnos en llevar la razón o que las cosas salgan como queramos para asegurarnos el control o la seguridad, sólo nos conduce al sufrimiento.
  • «Los sueños y deseos más anhelados, a veces no se cumplen». Aunque los pidas con insistencia, y probablemente “esté bien así”.
  • «Hasta que no aceptas una situación, no la superas». Y la completa aceptación puede durar mucho tiempo.
  • «Aceptar una crítica, un punto de vista diferente». Te hace reflexionar y descubrir otras posibilidades.
  • «Escuchar y entender el silencio». Puede ofrecer más respuestas que las teorías más sesudas que pueda elaborar nuestra mente.
  • «Las cosas no se pueden forzar ni apresurar». Porque lo único que provocarás es justo el efecto contrario.

Un deseo

Y sí tuviera que pedir un deseo o un regalo para esta Noche de Reyes, pediría la capacidad de seguir abierto a aprender algo nuevo. Porque sí algo he aprendido en este año, es que la única forma de luchar contra la rutina, la apatía, la desidia y la desmotivación es continuar aprendiendo.

“Aprender es el único antídoto contra la vejez” (Howard Gardner)

“Quizás este sea el verdadero camino del cambio, y el mejor regalo que podamos recibir: tomar conciencia de los aprendizajes más profundos, los que transforman nuestro ser y nos transforman como persona.”

Better Days – Bruce Springsteen